Victoria del Zaragoza para seguir con paso firme
El Zaragoza dejó en casa una ajustada y trabajada victoria bajo la lluvia ante el Numancia. La buena primera parte de la escuadra de Luis Carrión no fue suficiente para sacar premio de La Romareda.
Real Zaragoza 1-0 CD Numancia
Los maños saben de lo afilados que tienen los dientes y empezaron el partido enseñándoselos al Numancia. Con unos primeros cuatro minutos fulgurantes, comenzaron una carrera hacia el gol que poco les duró. Poco a poco los sorianos fueron haciéndose dueños de una posesión que se negaban a soltar y que sabían aprovechar.
Con Igbekeme y Javi Ros en el banquillo, el equipo local perdió dominio sobre el balón. Esto provocó que a los visitantes no les costara superar las líneas de presión y estuvieran muy cerca de obtener recompensa de su buen planteamiento.
Fue Higinio por partida doble quien estaría más cerca de ver puerta. Primero en el minuto 16 con un disparo al palo y en el 26 con otro chut que acababa en córner, el delantero murciano se quedó muy cerca de hacer el 0-1.
Al Zaragoza se le echaba su rival encima y empezó a reaccionar. El primero en traducir mejoría en ocasiones fue Álex Blanco. El jugador cedido por Valencia hacía reaccionar a Dani Barrio con un disparo raso que estuvo cerca de hacer cantar gol a la afición local.
Por su parte, Luis Suárez empezó a caer a banda y buscar el desborde para crear las ocasiones. De las piernas del colombiano nacerían muchas subidas a línea de fondo acompañadas de centros, estando uno de ellos cerca de ser rematado por Alberto Soro.
A pesar de ser los locales quienes llevaron el control en la recta final de la primera parte, los primeros 45 minutos concluían con una ocasión del Numancia. Cristian Álvarez salvaba, con un paradón, el remate a bocajarro y en soledad de Higinio Marín, quien veía como se le escapaba la posibilidad de hacer que su equipo se fuera al descanso ganando.
La segunda parte dio de sí un cambio de guión para los locales
El descanso le dio que pensar a Víctor Fernández. El entrenador maño metió a James Igbekeme para desatascar la medular, hizo que Puado jugara caído a banda izquierda y Luis Suárez quedara solo en punta de ataque.
En el inicio de la segunda contienda no hubo dominador. Ambos equipos se anularon bajo una lluvia que cada vez se hacía más intensa. Sería Luis Suárez, con un disparo desde la frontal primero, y Puado después, quienes más cerca tendrían el gol en el primer cuarto de hora de la segunda parte.
Sería el delantero catalán quien, finalmente, borraría las tablas del marcador. El jugador cedido del Espanyol recibía un centro raso de Luis Suárez que no se pensaba dos veces en rematar con la diestra.
Con un Real Zaragoza que defendía bien el resultado y un Numancia que, tras el gol, se mostró estéril sobre el verde, el partido concluía con un resultado que deja a locales a tres del ascenso directo y a visitantes en puestos de playoff. Ambas situaciones a la espera de partidos a disputarse mañana domingo.
Foto de portada: Real Zaragoza
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