El AC Milan logra la sexta en el teatro de los sueños
El AC Milan y Juventus de Turín se enfrentaron en la final de Champions League de la temporada 2002-2003 en Old Trafford. Se esperaba un duelo muy igualado entre los dos equipos más grandes de Italia, el vigente campeón de la Serie A, la Juventus frente al cinco veces campeón de la Copa de Europa, el Milan. Un partido con defensas muy férreas a la italiana con pocas ocasiones y que los rossoneri acabarían ganando el título en la lotería de los penaltis.
AC Milan 0-0 (3-2) Juventus de Turín
La Juventus de Marcello Lippi llegaba a la final con la baja por sanción de su estrella Pavel Nedved, factor que hacía que el Milan llegase a Manchester siendo el favorito ya que contaba con todas sus estrellas para el partido.
El Milan saltó al teatro de los sueños enchufado y dominó el partido desde el primer minuto. Pronto llegaría la primera ocasión clara, en el minuto 8 los rossoneri enlazaron una gran transición ofensiva que acabó con gol de Shevchenko. Pero el gol no subió al marcador ya que el linier lo anuló por fuera de juego posicional de Rui Costa. El Milan ya había avisado y la Juventus no lograba reaccionar, en el minuto 16 el ariete Inzaghi remató de cabeza un buen centro, pero un joven Buffon logró despejar gracias a sus reflejos.
Los hombres de Ancelotti seguían dominando el partido a través de la posesión por su increíble centro del campo con Gattuso, Pirlo, Seedorf y Rui Costa, pero no llegaban con mucho peligro a la meta de los bianconeri. En el minuto 27 llegó la primera aproximación de la Juventus tras un disparo de Del Piero que se fue por encima de la meta defendida por Dida. La primera parte terminó y el 0-0 reinaba en el marcador.
La Juve salió mejor en la segunda parte
La Juve salió a morder en la segunda parte y en el minuto 47 Antonio Conte, que acababa de ingresar al campo, remató de cabeza un centro de Del Piero al larguero. En tan solo dos minutos, los bianconeri ya habían generado más peligro que en toda la primera parte. Se notaba el partido mucho más igualado con posesiones alternativas para ambos equipos pero sin crear peligro.
En el minuto 75 el Milan volvió a coger las riendas del partido y tuvo dos claras para ganar el partido. La primera un remate que Inzaghi envió por encima del travesaño y la segunda otra vez Inzaghi, que se sacó un chute de espaldas que Buffon tuvo que hacer una gran parada para evitar el gol. Tras estas dos ocasiones, el partido se veía revocado a la prórroga y los dos equipos empezaron a especular para no perder la final en los últimos instantes.
La final llegó a la prórroga, los dos equipos con los tres cambios ya realizados y con un gran miedo a perder el partido por algún pequeño error. Los minutos pasaban y no lograban crear ocasiones claras y la tanda de penaltis se veía cada vez más cerca. Ninguno de los dos conjuntos veían con malos ojos llegar a los once metros, ya que contaban con dos de los mejores porteros del mundo, Dida para el Milan y Buffon para la Juventus.
La tanda de penaltis decidiría el campeón
Tras 120 minutos de máxima igualdad y pocas ocasiones, llegó el momento decisivo. La lotería de los penaltis decidiría el ganador de la Champions 2002-2003. Dida y Buffon dieron la talla y lograron parar cinco penaltis, tres Dida y dos Buffon. Shevchenko sería el encargado de lanzar el último penalti y tras engañar a Buffon anotó y el Milan logró alzarse con la Champions por 3-2.
La AC Milan lograba su sexta Copa de Europa a costa de la Juventus y acechar al Real Madrid como máximo ganador de la competición con nueve trofeos. Por su parte, la Juventus de Lippi volvía a perder una final tras aquella derrota en Múnich frente al Dortmund en 1997.
Foto de portada: AC Milan
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