Hasta el rabo todo es Copa
El Ciutat de València ha sido el escenario del segundo enfrentamiento de los cuartos de final de la Copa del Rey. El encuentro, entre el Levante y el Villarreal se saldó con la victoria por la mínima del conjunto granota. No fue hasta el último minuto de la prórroga cuando Roger anotó el primer y único gol del partido, que vale un pase a semifinales. Unas semifinales que el Levante alcanza por segunda vez en su historia, 83 años después de la primera.
Levante UD 1-0 Villarreal CF
Lo primero que llamaba la atención eran las alineaciones de ambos contendientes. Mientras los de Emery salieron con su mejor once disponible, Paco López prefirió dar descanso en Copa a las piezas clave. Morales, Melero, Roger y Clerc, escucharon el pitido inicial desde el banquillo. Sin embargo, todos ellos salieron en la segunda parte, siendo fundamentales para el devenir del encuentro.
Los dos conjuntos salieron con su libreto bien aprendido, honrando los estilos que les han llevado hasta ahí; muy distintos entre sí. El Villarreal, que gusta de tener la posesión y llevar la iniciativa, tardó un cuarto de hora en empezar a verse cómodo con el balón en campo contrario. Sus mejores bazas siempre en banda izquierda, donde aparecía Alcácer entre líneas para combinar con Moi Gómez y Pedraza. Así llegó el primer tiro a puerta de Alcácer, en el minuto 13, sin muchos problemas para el meta granota.
Paulatinamente y sin mucha prisa ni peligro, los de Emery fueron comiendo terreno al conjunto levantinista. Los de Paco López, conocedores de su papel, no se arrugaron y consiguieron meter el miedo el miedo en las filas amarillas. Con una eficaz pero intermitente presión y un desequilibrante Dani Gómez, que se revolvió dentro del área para sacar un disparo cruzado que se fue por poco.
En el tramo final de la primera parte se empezó a evidenciar el sensacional partido del portero copero del Levante, Dani Cárdenas, héroe del partido. Una buena reacción a un disparo de Pedraza y una espectacular estirada a un lanzamiento de Trigeros aseguraron la portería a cero hasta el descanso.
Aparente dominio groguet, valentía granota
En la segunda parte, el partido se fue abriendo cada vez más. Aunque el dominio, más por posesión que por peligro real, siguió ostentándolo el conjunto groguet. A los 5 minutos un buen balón de Trigueros deja a solo a Álcacer, que tras un magnífico control, su definición se topó con el inmenso muro que estaba levantado Cárdenas en la meta granota.
En ese momento, Paco López vio las orejas al lobo, y también los espacios que estaban dejando atrás los amarillos a medida que se hacían más largas sus posesiones. Por eso se decidió a usar los cambios para deshacer las rotaciones. Melero y Morales fueron los primeros elegidos. El Levante llegaba más área contraria con las sustituciones, aunque paradójicamente, su mejor ocasión la protagonizó Pedraza, con un remate involuntario que obligó a volar a Rulli.
El Levante estaba cada vez más envalentonando, lo que dio lugar a varias ocasiones en las dos áreas. Los últimos diez minutos del tiempo reglamentario fueron frenéticos, los locales tenían encerrado al submarino amarillo. Sin embargo, la mejor ocasión fue de los castellonenses, que casi dan la campanada en la que podría haber sido la última jugada del encuentro. El rechace de Cárdenas a una falta de Parejo cae para que remate Baena, pero aparece milagrosamente Postigo para sacarla bajo palos y forzar la prórroga.
La fe granota, factor clave en su pase a semifinales
La prórroga siguió la tónica del partido. Partido cada vez más abierto, con un Levante muy atrevido pero un Villarreal que mantenía la entereza y gozaba de las posesiones más elaboradas e incluso de ocasiones. Aunque la sensación de peligro granota no se materializaba en ocasiones, sí que obliga al Villarreal a estar muy atento en las ayudas defensivas. Merlero y Roger, muy activos, suponían un peligro constante. Aunque la más clara fue groguet, a Fer Niño se le fue arriba su remate a un balón picado al área de Trigueros.
En esa tendencia y con la creciente mejora de los de Paco López para atacar los espacios, llegó el gol definitivo. A pesar de la aparente tranquilidad amarilla, dada la falta de ocasiones claras de los locales, la incesante fe granota dio sus frutos en el último minuto de la prórroga. Cuando se oteaban la tanda de penaltis, nadie fue capaz de seguir, la cabalgada del “Comandante” Morales. El capitán, llegó hasta línea de fondo, esperó a la aparición de Roger y se la puso atrás para que fusile a Rulli.
“La Copa que nunca defrauda”
El gol de Roger supuso el 1-0 definitivo y el pase de su equipo, más de 8 décadas después, a unas semifinales de Copa del Rey. El conjunto granota se une así al Sevilla, a espera de si será o no su rival. Y si algo nos ha enseñado el actual formato copero es que siempre hay lugar para una sorpresa, aunque sea el minuto 120, cuando todo olía a penaltis.
Foto de portada: Levante UD