El Madrid de siempre vuelve y Zidane respira
Victoria importantísima del Real Madrid a domicilio ante el Sevilla gracias al solitario gol en propia puerta de Bono. Partido donde el conjunto blanco fue muy superior en la primera parte y supo defender los ataques sevillistas en la segunda parte, que fueron demasiado previsibles.
Sevilla FC 0-1 Real Madrid C. F.
Volvía la liga al Sánchez Pizjuán después de una semana horrible tanto para el Sevilla y Madrid en la Liga de Campeones. Novedades en el once de Lopetegui, Bono volvía a la portería y Aleix Vidal sorprendía en el lateral zurdo. Por su parte, Zidane daba entrada a Vinícius y Rodrygo para buscar velocidad arriba.
Fue echar a rodar el balón en el Pizjuán y no tardamos en ver la primera ocasión. Vinícius desaprovechó una gran oportunidad con un tiro demasiado cruzado. El Madrid buscó en esta primera parte el lado débil del Sevilla, el lateral izquierdo. Estos primeros minutos de la encuentro estaban siendo un inicio de partido de errores. Ambos equipos buscaban presión alta en la salida de balón rival. Los de Zidane supieron aprovechar mejor los errores sevillistas.
Los de Lopetegui se salvaron por los pelos antes con la ocasión de Vinícius y minutos después se volvieron a salvar. El brasileño presionó a Bono, que cometió un error en el despeje y a punto estuvo de costarle caro. Por suerte para los suyos no acabó en gol, pero los visitantes avisaron por segunda vez en menos de diez minutos.
Parecía otro Madrid el de hoy, nada que ver con el de jornadas anteriores. La decisión de Zidane de sacar a Vinícius y Rodrygo arriba para buscar velocidad y correr más estaba surgiendo efecto. Se estaba viendo un Madrid más organizado tácticamente y si fallaban se reorganizaban rápido para no dejar opciones al rival.
Después de unos primeros 20 minutos muy frenéticos se llegó al descanso con empate tras una primera parte con un Madrid muy superior al Sevilla y que no supo aprovechar los errores de salida de balón del conjunto hispalense.
Segundo tiempo distinto al primero
En este inicio de segunda parte, Óliver Torres tuvo que sustituir al lesionado Munir. El Sevilla se hizo con el balón y el Madrid optó por esperar en su campo, nada que ver como jugaron en la primera parte. Los de Lopetegui movían el balón de lado a lado pero sin encontrar la portería, lo único que encontraron fue una chilena sin peligro de De Jong.
Los de Zidane se sentían cómodos sin balón. Fijaos si estaban cómodos que en una contra montada rápidamente por los atacantes madridistas acabó en gol, Benzema daba un gran pase a banda para que Mendy centrara al corazón del área donde Vinícius la tocó lo justo para provocar el fallo de Bono. El brasileño despistó al guardameta sevillista, que se metió gol en propia meta.
En la primera parte el Madrid buscó más el gol y no obtuvo resultado y en esta segunda parte optó por esperar en su campo y obtuvo mejor resultado. Los blancos parecían aquel equipo que ganó la liga después del confinamiento, más trabajo en defensa y menos ataque.
Trascurrían los minutos y el Sevilla seguía con el dominio de balón, pero sin las ocasiones. Por ello, Lopetegui movía el banquillo, En-Nesyri, Suso y Gudelj para dentro y De Jong, Rakitic y Jordán al banquillo. Pero nada de nada, los de Zidane se defendían bien. El entrenador francés dio entrada a Asensio por un cansado Rodrygo.
El equipo hispalense lo intentaba una y otra vez pero ahí estaba la muralla blanca, en este caso negra. Ocampos lo intentó con una volea que despejó bien Courtois. Finalmente, el Real Madrid supo aguantar para llevarse los tres puntos de un campo que tanto le cuesta a los blancos como es el Sánchez Pizjuán.
Foto de portada: Real Madrid
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