El Espanyol logra salvar los muebles
Los catalanes lograron salvar los muebles y seguir sumando en Europa League gracias a los goles de Melendo y Darder y a un gran Diego López. El Ferencvárosi TC se puso por delante en dos ocasiones, pero el Espanyol logró sacar un empate en el último minuto que le hace pasar a la siguiente ronda como líder.
Ferencvárosi TC 2-2 RCD Espanyol
El Espanyol tuvo que hacerse fuerte en defensa y tratar de frenar las internadas por banda de Roland Varga, jugador que estaba llevando todo el peso del equipo húngaro. Si bien es cierto que el conjunto catalán con el paso de los minutos daba sensación de ser el claro dominador del juego.
Todo cambió tras una falta sacada por el Ferencvárosi desde el costado que se paseaba por delante de los jugadores, no llegando a tocarla nadie. Esto propició que el balón envenenado golpease en el poste, y tras la falta de concentración de los azulones, David Sigér aprovechara el error defensivo para marcar a placer y adelantar a su equipo en el marcador.
El Espanyol se encontraba desubicado, pero una muy buena jugada de Pipa solucionaría y metería en el partido al equipo catalán. Pues, tras estar frente a frente con su defensor, decidió tirarle un túnel para ganar metros hacia línea de fondo. Una vez superado el primer defensor, optó por realizar una bicicleta hacia el exterior zafándose así de nuevo de otro rival y dar un pase a Melendo, que golpeó a puerta y tras tocar el balón en un defensor la pelota logró entrar.
Con este gol los catalanes ponían el empate en el marcador, un resultado que les era favorable para poder continuar su paso en Europa League. Además, este tanto calmó al equipo que comenzó a jugar a su ritmo y a controlar el partido, llegando siempre con peligro con las asociaciones de Granero y Melendo.
Los de Rebrov salieron a por el partido en la segunda mitad
La segunda parte daba comienzo, e Isael se echaba el equipo a la espalda para tratar de lograr romper el empate. Fue tanta la superioridad en los primeros diez minutos del juego que los pericos solo pisaban el área tímidamente en ocasiones muy contadas.
Tras diversos ataques de los húngaros, finalmente llegaría un penalti para ellos en el minuto 76 que fue protestado, pero que finalmente atajaría el arquero Diego López. Los minutos pasaban y el conjunto español no conseguía engancharse al partido, lo que provocó un fallo en la defensa que causaría el segundo penalti de la noche que esta vez Michal no iba a perdonar.
Parecía que el partido estaba acabado, pero en el descuento un jugador del equipo local vería la segunda amarilla y que por tanto significaba la expulsión. Sergi Darder colgaba el balón que Dídac no consiguió rematar de manera correcta en el área pequeña.
En el último minuto de partido se desataba la locura. Pipa recogía un rechace al borde del área y, tras librarse del defensor con un cambio de ritmo, ponía un centro al segundo palo que remataba a gol Darder debido a la mala salida de Dibusz. El Espanyol lograba el empate, mantenía así su invicto en Europa y se aseguraba la primera plaza.
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