El Tenerife se revitaliza a costa de un débil Racing

Los pupilos de Javier Baraja se reencontraron con los tres puntos tras un choque en el que fueron claramente superiores sobre su rival. Una obra de arte de Joselu y la pillería de Bermejo resultaron determinantes en la consecución del partido para el conjunto isleño. El Racing recortó distancias en el tiempo de descuento gracias a un gol de Jon Ander, pero no fue suficiente.

Real Racing Club 1-2 CD Tenerife

Joselu adelantó a los suyos con un auténtico golazo

Racing y Tenerife se citaban en los Campos de Sports de El Sardinero con la obligación por parte de ambos equipos de sumar de tres, ya que ninguna de las dos escuadras habían logrado la victoria en los dos partidos anteriores. 

El duelo empezó de maravilla para el Tenerife, que en el minuto 1o’ ya se encontraba por delante en el marcador. Joselu aprovechó un despeje fallido de Aitor Buñuel, levantó la mirada y observó que Luca Zidane no estaba bajo palos, por lo que no desaprovechó la oportunidad de sorprenderle desde el medio del campo.

Tras el gol, el Racing, descompuesto y con despistes defensivos, trató de proponer juego, lo que parecía no prosperar. Pasados los minutos, Abraham Minero obligó a intervenir a Ortolá después de un tiro raso con su pierna derecha desde el costado izquierdo.

Poco a poco, el dominio de los locales se fue acentuando, lo que provocó que el Tenerife reculara y pasase a defender con todos sus hombres en su campo. Jugadores importantes del Racing como Borja Galán y Lombardo se ofrecían e intentaban proponer algo diferente, pero no había manera.

El equipo visitante creaba peligro cada que llegaba al área rival. Para alegría de los cántabros, el colegiado rectificó un penalti que había señalado por mano de Jordi Figueras, considerada “involuntaria” desde la sala del VAR. 

Antes de llegar al descanso, un desbarajuste defensivo del Racing estuvo a punto de costar el segundo gol para los canarios. Alex Muñoz se incorporó por el carril izquierdo, filtró un pase raso a Dani Gómez, que no pudo introducir el balón en el fondo de las mallas tras rematar forzadamente. Las situaciones de superioridad numérica de los isleños eran un quebradero de cabeza para los de casa. 

El Tenerife salió eléctrico de los vestuarios

La segunda mitad arrancó como finalizó la primera. Los errores defensivos y las dificultades en la elaboración no hacían más que jugarle una mala pasada a los cántabros, que se encontraban completamente sometidos. Tras una gran acción individual, Dani Gómez estuvo cerca de aumentar la renta.  

Y, como dice el refranero, tanto va el cántaro a la fuente que al final se acaba rompiendo. Llegados al minuto 52, un servicio desde el carril derecho por parte de Moore encontró la cabeza de Joselu, cuyo remate se topó con el travesaño. El rechace lo aprovechó Bermejo para rematar a placer y poner el segundo en el casillero.

El guion del encuentro no cambió tras el gol. El cuadro isleño hacía “saltar las alarmas” a la defensa racinguista, completamente vendida, cada vez que se asomaba por área rival. El conjunto local, la otra cara de la moneda, daba síntomas de clara debilidad e inferioridad y apenas lograba meter miedo en el cuerpo del contrincante.

Los minutos corrían y el Tenerife se sentía como pez en el agua con el esférico en su dominio. Los jugadores más ofensivos triangulaban sin apenas oposición por la medular y por zona de tres cuartos. Los locales, por su parte, llegaban a zona de peligro prácticamente a cuentagotas, con más corazón que fútbol. En la recta final, el Racing imprimió una marcha más al juego, lo que le impidió bajar la guardia a la zaga tinerfeña, muy cómoda y con poco trabajo durante el partido de hoy. Los acercamientos peligrosos, no obstante, no se materializaban.

En el tiempo añadido llegó el gol del honor del conjunto cántabro. Una acción individual de Lombardo desembocó en un córner finalizado por Jon Ander, que fusiló a Adrián Ortolá. Tras el tanto, los jugadores racinguistas se desplazaron al ataque llegando a asediar al cuadro isleño, aunque ya era demasiado tarde para buscar la igualada.  

Siguientes compromisos

Este resultado deja al Racing hundido y cada vez más cerca de la Segunda B. La siguiente jornada los de José Luis Oltra tendrán que desplazarse a la comarca de El Bierzo (León) para vérselas contra el Ponferradina en el Toralín. El Tenerife, por su parte, da un golpe por la permanencia y se coloca en mitad de tabla alejándose de los puestos fatídicos. Los de Javier Baraja se enfrentarán al Mirandés, una de las sensaciones de la temporada, la siguiente jornada en el Heliodoro Rodríguez López. 

Foto de portada: @realracingclub