Magia en el Maradona
El que no siga mucho la Serie A igual no sabe ni quién es Luis Alberto. Y por eso estamos aquí, para hablar de este gaditano de 30 años que pasó por Sevilla, Barça B, Liverpool, Málaga y Deportivo de la Coruña antes de arribar a Italia. Y no eligió mal sitio. Se asentó en la capital en 2016, cuando la Lazio pagó 5 millones de euros por su fichaje. Desde entonces, ha estado dejando varias actuaciones dignas de un jugón. No en vano, le llaman el mago. Y uno de los partidos que mejor refleja esa magia es el de la pasada jornada contra el Napoli. Y ojo, no cualquier Napoli.
El actual campeón de la liga italiana había empezado la temporada como un tiro. 6 de 6 tras vencer a Frosinone y Sassuolo y todo ello sin contar con su gran estrella, Kvaratskhelia, que justo volvía a la titularidad para enfrenarse a la Lazio. Por su parte, el equipo romano no podía haber comenzado peor. Cayó en su estreno en la 23-24 contra el Lecce y también hizo lo propio en casa contra el Genoa en la jornada 2.
Tras los primeros 30 minutos disputados en el Maradona, todo hacía presagiar que los de Sarri sumarían su tercera derrota consecutiva. Kvaratskhelia y compañía estaban avasallando a los capitalinos, teniendo ocasiones muy claras para marcar y, sobre todo, recuperando el balón prácticamente nada más lo perdían. Entonces apareció la magia. En una de las pocas llegadas de la Lazio, Felipe Anderson, posiblemente el mejor del partido junto a nuestro protagonista, se alió con el mago para que este sacara su varita a pasear. Y el resultado fue un precioso gol de tacón que enmudeció Nápoles. Al menos por unos minutos, ya que, en la siguiente jugada, Zielinski empataba el partido.
El inicio de la segunda mitad también fue para los locales, que comenzaron a asediar la portería de Provedel. Sin embargo, el mago volvería a aparecer y, de nuevo, asociándose con su mejor aliado, Felipe Anderson. El brasileño lideró una contra como buenamente pudo y acabó dándole el balón al 10, como siempre se debe hacer. Lo más importante de un líder es ser consciente de ello y saber en qué momentos debes ser protagonista y en cuáles no. Y Luis Alberto lo supo en Nápoles. Por eso, dejó pasó la pelota por debajo de sus piernas engañando a media defensa rival. De esta forma liberó a Kamada, que orientó el balón y dio un pequeño toque con su pierna izquierda para acabar fusilando el arco de Meret y establecer el 1-2. A partir de ahí, el encuentro cambió por completo.
Si los de Rudi García habían tenido el control absoluto, esa jugada, en la que el mago volvió a hacer su magia, lo puso todo patas arriba. La Lazio tuvo tiempo de hacer dos goles más, pero fueron anulados por fuera de juego. En el segundo de ellos, Luis Alberto volvió a dar un pase maravilloso. Una pena que no subiera el marcador y el gol se pierda como lágrimas en la lluvia, que diría Roy Batti. Aunque lo cierto es que el mago va sobrado de highlights, y de grandes partidos en grandes estadios, como el que nos brindó contra el Nápoles, cuando hizo suyo el Maradona.
Foto de portada: Lazio
Fundador y director de AreaDePenalti.